No despilfarre dinero comprando estufas, equipos de aire acondicionado, calefactores, etc., sin antes asesorarse sobre un eficaz aislamiento térmica de sus edificaciones, permitiéndole disfrutar de una mejor y más confortable solución para su familia. A continuacion les dejamos algunos de los materiales aislantes mas recientes en el mercado:
Celulosa Reciclada: Si los materiales ecológicos están subiendo como la espuma en lo que aislamientos se refiere, de entre ellos la celulosa es uno de los más empleados por sus muchas ventajas. Actualmente puede encontrarse en forma de paneles flexibles, fabricados con papel de periódicos viejos aglutinados con fibras de poliolefinas.
Destacan, en primer lugar, sus buenas propiedades aislantes. No sólo regula muy bien la temperatura, manteniendo el calor en invierno y protegiendo del calor en verano, sino que absorbe la humedad y amortigua los ruidos gracias a la alta densidad de las placas. Además, resulta muy manejable a la hora de instalarlo y puede utilizarse en suelos, paredes y techos.
Otra opción es la celulosa insuflada, con las mismas características, pero diferente ejecución.
Más información: www.biohaus.es
Fibra de Madera para Insuflar:
Es lo último en aislamientos ecológicos, un material de gran capacidad aislante que, además, es totalmente respetuoso con el medio ambiente. Se trata de una especie de espuma de fibras de madera que se insufla por un agujero en el hueco de la pared o de la cubierta, con ayuda de una manguera especial.
Una vez dentro, las fibras de madera se expanden y rellenan completamente el espacio, adaptándose perfectamente aunque éste sea irregular. De esta manera se forma una capa que no tiene juntas ni fisuras. Entre sus mayores cualidades destaca su poder para regular la temperatura interior de un espacio, consiguiendo una gran sensación de confort. Además, la instalación es bastante sencilla y no requiere grandes obras.
La empresa Biohaus Goierri comercializa este producto, bajo el nombre comercial de Gutex Thermofibre.
Lana de Roca Inyectada:
Es una nueva manera de proteger las paredes que dan al exterior que viene de la mano de Isover, especialista en aislamiento térmico y acústico.
Se trata del sistema Insuver, que consiste en insuflar de forma mecánica copos de lana mineral, lo que puede hacerse tanto por la fachada exterior como por la pared interior de la vivienda.
El resultado es un aislamiento perfecto, no sólo térmico sino también acústico, de fachadas rehabilitadas. Para poder ponerlo en práctica, es necesario contar con una cámara de aire de al menos 4 cm. de grosor.
El proceso es sencillo, no requiere obras y resulta económico, ya que con él se puede llegar a ahorrar hasta un 40% del gasto energético de la casa.
Aislantes para Techos y Suelos
Además de proteger las paredes y procurar que el aire frió no se cuele por puertas y ventanas, es necesario mejorar el aislamiento de techos y suelos. Por estas superficies también se nos puede escapar el calor y con él nuestro dinero. En forjados y cubiertas tendrás que usar materiales más ligeros que no pesen demasiado.
Es importante que estén bien protegidos frente a los ruidos y la temperatura, y conseguirlo es fácil. Basta con instalar un falso techo de yeso laminado e introducir lana de roca, un material que contribuye a amortiguar los ruidos y mejorar la insonorización de los espacios.
También se puede optar por los paneles sándwich, que llevan tres materiales en una sola pieza: la placa rígida que actúa como base, el material aislante y el revestimiento interior, que es la cara que se ve.
Telas Asfálticas para Azoteas
Si vives en una casa con cubierta plana, transitable o no, has de tener en cuenta que esta será uno de los puntos de la casa que habrá que aislar convenientemente. Es necesario instalar tela asfáltica que proteja la azotea y, una vez colocada, cuidar de que no se rompa ni se levante. Si esto ocurre habrá que reparar los desperfectos soldando una tela nueva, o también mediante productos adhesivos específicos, más fáciles de manejar.
Pavimentos bien Aislados
Además de las paredes y los techos, también los suelos merecen que les prestemos un poco de atención, desde el punto de vista del aislamiento. Hay algunas acciones sencillas que pueden mejorar las condiciones del pavimento, tanto acústica como térmicamente. Por ejemplo, si vamos a instalar un suelo laminado, debemos poner debajo una capa de espuma, o de otro material, para aislar del frío y para evitar que los ruidos se transmitan al piso inferior.