El sistema constructivo EMMEDUE esta conformado por paneles de poliestireno expandido con dos mallas o redes de alambre de acero galvanizado y electrosoldado unidas entre sí por conectores. Los edificios construidos con este sistema tienen la particularidad de ser antisísmicos y aislantes. Este sistema tambien permite construcciones de hasta 3 pisos de cualquier tipo o características arquitectónicas, desde las más sencillas hasta las más complejas.
Al sistema Emmedue se le puede asociarse fácilmente a otras tecnicas constructivas tales como techos livianos de madera, acero o paneles autoportantes, estructuras de acero u hormigón, así como combinarse al uso de paredes de cartón-yeso en muros no portantes.
Las edificaciones construidas con EMMEDUE tienen una importante función aislante, ya que el espesor del panel se puede personalizar en función del aislamiento térmico específico por el que se haya optado. Además, la aislación se desarrolla ininterrumpidamente para todas las superficies que componen la envolvente de la construcción, sin ningún puente térmico. Por ejemplo, una pared de este material que posea un espesor acabado de15 centímetros tiene un aislamiento térmico igual al de una pared de mampostería aislada de unos 40 centímetros, lo que supone evidentes ventajas de un mayor espacio útil, menor peso sobre fundaciones y realización de obra en menos etapas.
Esa placa llega a la obra tal como fue fabricada. Allí se corta y adapta para construir los cerramientos verticales y horizontales que definen los espacios de la vivienda. Con esas placas colocadas en el sitio, se proyecta, de forma neumática, mortero de arena y cemento portland en ambas caras de las placas. Al final de este proceso tenemos un sándwich, constituido por dos capas de mortero armado compuestas por el mortero y el acero que viene en la placa y un núcleo aislante de espuma de poliestireno.
El espesor de este muro depende del espesor del poliestireno con que se haya partido y la cantidad de material de arena y cemento que le hayamos agregado. Usualmente, un muro mínimo de diez centímetros de espesor verifica la aislación acústica necesaria para separar ambientes de una misma unidad de vivienda. Si lo que queremos es separar ambientes de diferentes unidades, por ejemplo apartamentos, tenemos que utilizar paneles de mayor espesor de espuma.