La carrera de Diseño de Interiores es una disciplina proyectual que involucra el proceso de mejorar la función y cualidades del espacio interior, con la manipulación del volumen espacial así como el tratamiento superficial (materiales y objetos).
Su alcance es superior a la decoración, ya que indaga en aspectos más amplios: la psicología ambiental, la arquitectura y el diseño de productos.
Un diseñador de interiores es un profesional calificado dentro del campo del diseño interior o aquel que diseña interiores de oficio como parte de su trabajo.
El Diseñador de Interiores crea y recrea espacios a partir del desarrollo de su creatividad y sensibilidad, conjugando el arte y la técnica, la funcionalidad con los estilos y la personalidad.
Puede diseñar el interior de un banco, una escuela, un sanatorio, un negocio de venta al público, así como stands, vidrieras, oficinas, etc.
Esta profesión permite programar, diseñar, ejecutar y fiscalizar proyectos de diseño, ambientación y remodelación de todo tipo de espacios interiores y exteriores, incluyendo el diseño del mobiliario, el diseño paisajístico y el mantenimiento de jardines, y la ambientación efímera de los espacios públicos y privados.