Los techos verdes conocidos también como azotea viva, azotea ajardinada, green roof o sky garden, consiste en un sistema integral compuesto por varias capas de materiales diseñados para promover el crecimiento de vegetación en azoteas, terrazas y áreas abiertas poco utilizadas.
Se instala reemplazando directamente cualquier acabado que se tenga sobre la loza; impermeabilizante, grava, teja, etc.
Son una excelente opción para compensar la destrucción de áreas verdes propiciada por cada nuevo proyecto de construcción urbana. Su instalación implica una serie de capas que se ponen sobre el techo de la casa: membrana impermeable, aislamiento, riego, filtración, tierra y césped.
El producto final puede ser del tipo extensivo, que consiste en pasto y flores, y que no necesita mucho manejo, o puede ser del tipo intensivo, que incorpora arbustos y árboles, lo que requiere un manejo más intenso. En efecto, los techos verdes son jardines encima de la casa, que pueden incluso incorporar otros elementos propios de estos espacios.
Si bien la vegetación en techos y azoteas ha sido utilizada recurrentemente a lo largo de la historia de la arquitectura, no es hasta finales de los años sesenta que nace en Alemania el concepto de techos verdes como se conoce hoy en día.
Hasta finales de 2008 se habían instalado más de trece millones de metros cuadrados de azoteas verdes en ese país y este año se sumarán cerca de un millón más.
El término techo verde también se usa para indicar otras tecnologías “verdes”, tales como paneles solares fotovoltaicos. Otros nombres para los techos verdes son techos vivientes y techos ecológicos.
Ventajas del uso de Techos Verdes
Los techos verdes se pueden usar para:
- Cultivar frutas, verduras y flores
- Mejorar la climatización del edificio
- Prolongar la vida del techo
- Reducir el riesgo de inundaciones
- Filtrar contaminantes y CO2 del aire; véase también Paredes de cultivo
- Actuar como barrera acústica; el suelo bloquea los sonidos de baja frecuencia y las plantas los de alta frecuencia.
- Filtrar contaminantes y metales pesados del agua de lluvia
- Proteger la biodiversidad de zonas urbanas
Un techo verde es un componente clave de un edificio autónomo. En un estudio reciente sobre el impacto de estructuras verdes en la zona de Manchester los investigadores comprobaron que los techos verdes ayudaban a bajar las temperaturas especialmente en zonas urbanas: “agregar techos verdes a todas las estructuras puede tener efectos dramáticos en la temperatura de la superficie, manteniendo la temperatura por debajo de los promedios de los años 1961-1990.
Los techos verdes tienen mayor impacto… donde la proporción de edificios es alta y la proporción de evaporación es baja. Por lo tanto la mayor diferencia ocurre en el centro de las poblaciones.”